Después de ser absuelto por la Audiencia Provincial de Madrid de la acusación de tres delitos fiscales, el futbolista Xavi Alonso, una de las pocas excepciones a la tendencia general de ceder ante el chantaje de Hacienda, ha visto como se le abre un nuevo frente. La Sección de Delitos Económicos de la Fiscalía de Madrid ha presentado una nueva querella contra el exfutbolista por la presunta comisión de un delito fiscal durante un ejercicio distinto al que motivó la sentencia de la Audiencia Provincial de Madrid, 2014, y le acusa de un fraude que asciende a 840.017 euros.
Resulta lamentable la capacidad que tiene la Administración tributaria de empecinarse en atacar a un contribuyente por unos mismos hechos que ya han sido juzgados. Y lo peor es que esta práctica la sufren numerosos contribuyentes que ven cerradas sus empresas por el acoso de la Administración tributaria, sin tener los mismos recursos que el futbolista para defenderse.